El seguro de vida desempeña un papel crucial en tu planificación financiera por ofrecer una buena solución para proteger económicamente tu propia vida y la de tu familia: garantiza vuestra independencia económica en caso de que fallezcas o quedes inválido o gran dependiente por enfermedad o accidente…. Pero ¿qué capital asegurado debes contratar en tu seguro de vida?
El seguro de vida que debes contratar es aquel que se adapte específicamente a tus necesidades personales y familiares en cada momento de tu vida. De ahí que sea fundamental que los beneficiarios reciban una compensación suficiente para mantener su bienestar financiero en momentos difíciles.
El capital asegurado de tu seguro de vida
En el cálculo del capital asegurado de tu seguro de vida debes ser muy conservador. La idea es muy simple: define una cifra capaz de cubrir tus necesidades y las de tu familia si tú dejas de trabajar por quedar inválido o fallecer. Suma los siguientes conceptos y seguro que conseguirás una cifra asegurada realista y adaptada a tus potenciales necesidades económicas:
- manutención de tu unidad familiar mediante los ingresos que aportas: Dependéis de ellos para conservar vuestro nivel de vida actual: vivienda, alimentación, ropa, gastos de educación, vacaciones/ocio, etc. El seguro debe proveer de ingresos sustitutos para compensar la pérdida de tus ingresos.
- deudas personales y familiares de las que eres responsable mientras no las hayas liquidado: hipotecas, préstamos estudiantiles, tarjetas de crédito y otros pasivos. La suma asegurada debe permitir liquidar dichas deudas para que no supongan una carga financiera a los beneficiarios.
- educación de tus hijos: desde la escuela primaria al ciclo formativo o bachillerato, grado medio o superior y al máster en España o en el extranjero. Un capital asegurado adecuado debe cubrir estos gastos y asegurar que los objetivos educativos de la familia se mantengan intactos.
- el impuesto de sucesiones es un capítulo que puede hacer necesario ser prudente y reservar un cierto importe para dicha eventualidad para evitar descapitalizar el patrimonio familiar para hacer frente a su pago.
La suma resultante de estos conceptos es la cifra que debes considerar como capital asegurado actual de tu seguro de vida.
Esta cifra evoluciona en el tiempo de acuerdo con tu situación profesional, personal y familiar. Por ello, podrás aumentarla o reducirla conforme tengas más hijos, adquieras otros inmuebles, elimines la hipoteca sobre tu vivienda, tus hijos se hayan independizado y no dependan de ti, ya tengas pagado el coche o tu barco, o la empresa te haya prejubilado, etc.
Calcular el capital asegurado de forma precisa puede ser un proceso complejo que requiere considerar múltiples variables y escenarios. Es recomendable trabajar con un corredor de seguros como los profesionales de LLULL Segur que pueden ayudarte a evaluar de manera integral tus necesidades financieras y asesorarte sobre el monto adecuado de capital asegurado para garantizar la protección financiera de los beneficiarios.